Duradero: La boquilla está hecha de materiales duraderos y de alta calidad para soportar la alta presión y el calor de las operaciones de extinción de incendios.
Ajustable: La boquilla tiene ajustes ajustables para controlar el patrón de flujo y pulverización, lo que permite a los bomberos adaptarse a diferentes situaciones de incendio.
Fácil de usar: La boquilla es fácil de colocar, quitar y operar, incluso en situaciones de alto estrés.
A prueba de fugas: La boquilla está diseñada para evitar fugas, asegurando que toda el agua o la espuma contra incendios se dirija hacia el fuego.